Australia está trabajando con las aerolíneas para revisar el protocolo de seguridad en los aviones, principalmente en la cabina de los pilotos, tras el accidente del avión de Germanwings en los Alpes franceses, informaron hoy fuentes oficiales.

"Aunque la tragedia de Germanwings ocurrió muy lejos de Australia, es importante que los pasajeros tengan la seguridad de que se están tomando todas las medidas pertinentes para garantizar la seguridad", afirmó en un comunicado el ministro de Infraestructuras, Warren Truss.

El ministro dijo que ha encargado a las aerolíneas que revisen todos los protocolos de seguridad, al tiempo que precisó que en Australia todos los pilotos pasan pruebas psicológicas y en muchas compañías es obligatorio que haya siempre dos personas en la cabina del piloto.

La catástrofe del vuelo 9525, según las investigaciones de la Fiscalía francesa, la causó presuntamente el copiloto alemán de Germanwings Andreas Lubitz, quien se encerró en la cabina de mando aprovechando que su capitán se había ausentado y estrelló el avión contra la montaña el pasado martes.

Las autoridades francesas han acelerado el rescate y la identificación de los restos de los 150 ocupantes de la aeronave que cubría la ruta entre la ciudad española de Barcelona y la alemana Düsseldorf.