La Audiencia de Las Palmas condenó a dos años de cárcel por estafa al director de una sucursal bancaria de Gáldar que en julio de 2011 se quedó con 30.000 euros que dos clientes le habían entregado para abrir un depósito.

La sentencia declara probado que Santiago R.P.P. convenció a dos clientes de la sucursal del Banco Sabadell que dirigía para que le entregaran un cheque al portador para abrir un depósito. El procesado se apropió del dinero. Los afectados le reclamaron esa cantidad y el acusado se ofreció a devolverles el dinero, a través de dos pagarés, pero de una cuenta sin fondos.