Policías locales de Candelaria imputaron en la madrugada del pasado sábado a un joven de 29 años, identificado como J.M.C.R., como presunto autor de un delito contra la seguridad vial, ya que circuló en evidente estado de embriaguez por un calle en sentido contrario y de forma temeraria, hasta el extremo de que estuvo a punto de atropellar a decenas de personas que salían de una terraza en la calle Fayna.

El conductor circulaba en un Citroën Xsara gris y se aproximó con las luces apagadas a un control preventivo de los agentes municipales en la confluencia de la calle Fayna con la Avenida Marítima. A pesar de detectar el dispositivo estático, el individuo aceleró y se introdujo en sentido contrario en la primera de las vías, con el objetivo claro de evitar el despliegue policial.

El citado individuo, que es vecino del barrio Chimisay Alto, circulaba de forma zigzagueante por una vía con un único sentido de circulación y en dirección contraria, a pesar de las indicaciones realizadas segundos antes por los agentes municipales.

En la calle Fayna la situación llegó a ser de mucho riesgo, porque a esa hora cierra una terraza de moda en el municipio de Candelaria y decenas de personas salían de la misma, con la circunstancia agravante de que en la mencionada vía urbana no existen aceras.

Segundos después se inició la persecución por parte de los policías locales que tomaron parte en el control.

Se estima que el joven circuló unos 300 metros en sentido contrario.

El citado conductor también pasó por la calle Agarfa y se introdujo en la calle Armiche, donde finalmente fue interceptado por los agentes municipales.

El individuo y sus dos acompañantes trataron de huir a pie, pero se les impidió tal acción.

Entonces, los funcionarios comprobaron que el estado de embriaguez del joven era considerable, mientras que sus dos acompañantes colaboraron con los policías y no obstaculizaron su acción, según trascendió ayer.