La Guardia Civil ha desmantelado una organización criminal especializada en el robo de cable de cobre y ha detenido a nueve personas e imputado a cuatro más que se dedicaban a perpetrar este tipo de robos y que actuaban en Madrid y Guadalajara.

La investigación se inició en marzo último, tras presentar una denuncia el propietario de una empresa de Arganda del Rey (Madrid), dedicada a la venta de bobinas de cobre, de la sustracción de 6 toneladas de dicho material del interior de su empresa, ha informado hoy el Ministerio de Interior en nota de prensa.

Tras realizar una primera inspección ocular, los agentes realizaron un cruce de datos con otras unidades con la finalidad de ubicar otras posibles víctimas que hubieran sufrido un robo de características similares, que se veía constatado al localizar otros robos donde el modus operandi y el objetivo era el mismo tanto en la provincia de Madrid como en Guadalajara.

Las primeras investigaciones se centraron en el poblado marginal El Gallinero, próximo a Arganda del Rey, donde los agentes detectaron un incremento de actividad en la quema de las carcasas que recubren el cable de cobre, que realizaban para poder venderlo a posteriori.

Se localizó también una empresa de recuperaciones en Mejorada del Campo (Madrid), donde una de las víctimas reconoció parte del cobre que le habían sustraído.

Con ese control, se logró identificar a los integrantes del grupo, entre los que se encontraba un menor.

Durante la investigación, desarrollada por el Equipo de Policía Judicial de Arganda del Rey, se cruzaron informaciones con la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Guadalajara, que investigaba a uno de los integrantes del grupo por su presunta implicación en dos robos con violencia e intimidación en Quer (Guadalajara).

El objetivo del grupo eran las empresas que almacenaban grandes cantidades de cobre, que les garantizaba unas mayores ganancias.

La localización del receptador de la mercancía ha sido esencial en el proceso de la investigación al recuperarse cerca de 5.000 kilos de cable de cobre, si bien hay sospechas de que esta persona adquirió a los integrantes del grupo organizado desmantelado unas 30 toneladas de cobre de procedencia ilícita, según se acredita en el cómputo global de la facturación analizada.

Los detenidos, de nacionalidad rumana y española, cuentan con edades comprendidas entre los 17 y los 42 años, contando con antecedentes por hechos similares.

Tras ser puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente, se decretó el ingreso en prisión de los seis autores materiales de los robos mayores de edad y el internamiento en un centro de menores del menor detenido.