La Guardia Civil ha esclarecido un total de 36 delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico en Gran Canaria, todos robos cometidos con fuerza en las cosas y a través del método del alunizaje con motocicletas.

Los robos se habían realizado entre el 23 de diciembre de 2014 y el 10 de junio de 2015 en varios municipios del norte de Gran Canaria, por lo que con su esclarecimiento se da por concluida la operación ''Motoghost'', según informó la Guardia Civil en nota de prensa.

El esclarecimiento de estos hechos se produce después de investigar a un grupo criminal especializado en los robos con fuerza en locales comerciales de diferentes barriadas de las localidades de Arucas, Teror, Santa Brígida, Vega de San Mateo y Las Palmas de Gran Canaria.

Los presuntos autores de los hechos empleaban el procedimiento del alunizaje con motocicletas, de tal forma que impactaban con la rueda delantera en las puertas de los comercios hasta llegar a fracturarlas para, posteriormente, sustraer los cajones de las cajas registradoras, ordenadores o teléfonos móviles, entre otros.

Así, el inicio de la investigación se produce con un robo con fuerza cometido en diciembre de 2014 en un establecimiento de Arucas, donde los presuntos autores utilizaron el alunizaje, provocando rotura de las puertas de acceso, pudiendo sustraer varios efectos, tales como un ordenador, teléfonos móviles o dinero, entre otros. En esta ocasión ocultaron sus manos con guantes y sus rostros con cascos de motocicletas.

En este sentido, la Guardia Civil indicó que al tratarse de un procedimiento "inusual" para acceder al comercio, y dado que posteriormente se produjeron otros delitos con características similares en la ejecución de los hechos, el Equipo Territorial de Policía Judicial (ETPJ) de Santa María de Guía inició la operación ''Motoghost'', tras obtener una serie de indicios que posibilitó a los agentes "ponerse en la pista" de varios posibles autores.

Para ello se contó también con la colaboración de la Policía Nacional y se pudo saber que los sospechosos estaban además implicados como presuntos autores de otros delitos similares, repartidos por diferentes pueblos y barrios de Gran Canaria. DE NOCHE Y EN PEQUEÑOS COMERCIOS

En cuanto a la forma de actuar de los presuntos delincuentes, se centraban en las horas nocturnas y en los pequeños comercios donde aunque tuvieran medidas de seguridad como pueden ser alarmas sonoras, los autores podían acceder de forma rápida y sustraer objetos que fueran fáciles de portar fácilmente (ordenadores, teléfonos móviles).

Así, una vez obtuvieron los agentes todos los datos de las diferentes inspecciones oculares de los establecimientos afectados, así como de las diferentes gestiones e intercambios de información con otros cuerpos policiales, pudieron esclarecer la "totalidad" de los delitos contra el patrimonio y orden socioeconómico por el grupo investigado.

En este sentido, indicaron que de los 36 robos esclarecidos, 16 tuvieron lugar en demarcación del Cuerpo Nacional de Policía, con quienes aseguran se mantuvo una "colaboración continua" para culminar esta operación policial.

TRES DETENIDOS

Esta investigación se ha saldado con la detención los días 6 y 27 de agosto de tres personas, dos hombres y una mujer, que responden a las iniciales de K.G.A., S.N.R.R. y P.E.L.H., así como a la imputación de otro hombre que responde a las iniciales de A.A.C.C., todos vecinos de Las Palmas de Gran Canaria y de edades comprendidas entre los 24 y 36 años de edad, a quienes se les acusa como presuntos autores de los ilícitos penales descritos.

Asimismo, en el registro realizado el 6 de agosto en la vivienda de K.G.A. en Las Palmas de Gran Canaria se hallaron 10 dosis de crack preparadas presuntamente para su posterior venta, así como una cantidad indeterminada de ese mismo tipo de droga que alcanzaban unos tres gramos de peso, por lo que a esta persona se le imputó también un delito contra la salud pública.

En relación con esta persona, la Guardia Civil comprobó que tenía una orden de alejamiento en vigor de la pareja actual con la que convivía, sin haberlo comunicado ambos previamente al Juzgado que dictó la medida de seguridad descrita, por lo que también se le imputó un delito de quebrantamiento de condena.

Todos los implicados han pasado a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Arucas, en Gran Canaria.