La Fiscalía argentina comenzó a investigar las denuncias de los habitantes de una villa de Buenos Aires que acusan a agentes de una fuerza de seguridad nacional de disparar balas de goma para desalojar a un grupo de niños que ensayaba el carnaval.

Después de recabar testimonios, la Procuraduría de Violencia Institucional de Argentina (Procuvin) denunció hoy penalmente el comportamiento de miembros de la Gendarmería (Policía de frontera), a quienes acusan de efectuar los disparos.

Tras la polémica causada por la difusión de imágenes que muestran a los niños heridos, el Ministerio de Seguridad de Argentina también decidió indagar los hechos y formó una comisión de la Subsecretaría de Participación Ciudadana para obtener información y testimonios y evaluar lo ocurrido, indicó la cartera en un comunicado.

Según informaron habitantes del barrio, el episodio sucedió en la noche del viernes en una villa ubicada en la zona sur del barrio porteño de Flores, cuando agentes de la Gendarmería desalojaron a balazos de goma a unos 80 niños de entre 4 y 11 años pertenecientes a la murga "Los Auténticos Reyes del Ritmo", en una reyerta que dejó ocho heridos de gravedad, de los que cinco son menores de edad.

El incidente provocó la polémica en el país y las redes sociales se encendieron pidiendo explicaciones por lo sucedido, mientras que el jefe de Gabinete argentino, Marcos Peña, reclamó en rueda de prensa "ir a fondo" e "investigar" la represión cometida por los gendarmes.

No obstante, precisó que también hay "dos gendarmes heridos de bala en el mismo operativo", un hecho que para el funcionario también hay que investigar, aunque, según publicó la Fiscalía argentina en un comunicado en su web, de momento no hay elementos que indiquen que las personas agredidas tuvieran armas.

Tampoco hay indicios, según la Procuvin, que apunten a que los gendarmes fueran heridos en el contexto de la represión denunciada ante el Ministerio Público Fiscal.

El propio director de la murga, Gustavo González, escribió una carta en el perfil de Facebook de la revista La Garganta Poderosa, donde relató la acción de los gendarmes y negó que los chicos hubieran lanzado piedras a los agentes, como, dijo, apuntaron desde el Gobierno de la ciudad.

Según González, todavía quedan dos personas ingresadas en el Hospital Piñero de la capital: un chico que sufrió heridas graves al recibir un balazo de goma en la cabeza y una mujer que también resultó herida.

En un mensaje en el que acompañó fotografías de las heridas provocadas por los disparos, el director de la murga relató además que un niño de 6 años estuvo apunto de perder un ojo también a causa de una pelota de goma.