Investigadores del Cuerpo Nacional de Policía tratan de determinar si los jóvenes autores de los atracos en el barrio lagunero de Los Majuelos durante la madrugada y la mañana del pasado martes también están implicados en otro robo violento cometido en un negocio del barrio santacrucero de Tíncer.

Y supuestamente el citado asalto en dicho núcleo chicharrero ocurrió en horas próximas a los llevados a cabo en la cafetería Manigua de Los Majuelos, así como en un horno de pan, en una tienda de 24 horas y supuestamente a una mujer que caminaba por la calle.

Ayer trascendió que ambos veinteañeros tienen numerosos antecedentes policiales y casi todos ellos están relacionados con hechos en los que utilizan la violencia.

Uno de los apresados por la Policía Nacional en la calle del Pilar de Los Majuelos había salido de prisión a finales del pasado año.

Supuestamente, su ingreso en la cárcel también estuvo relacionado con robos con violencia e intimidación en establecimientos comerciales, bares o cafeterías, según las fuentes consultadas ayer.

Una de las características de los delitos cometidos por las mencionadas personas es que actúan con gran violencia y no dudan en propinar golpes a trabajadores de las empresas afectadas por sus acciones.

Además, en diversos delitos contra el patrimonio muestran interés por sustraer el dinero que existe en la caja registradora de los locales.

Así ocurrió a las 7:10 horas del martes en la cafetería Manigua, cuando los dos jóvenes ahora detenidos accedieron al establecimiento armados con un cuchillo y una patacabra.

Los dos delincuentes se subieron a la barra cuando un empleado preparaba bocadillos y el negocio aun no tenía clientes.

El trabajador les hizo frente e impidió llegar a la caja registradora a uno de los individuos.

Sin embargo, el segundo de los ladrones aprovechó dicha circunstancia para llevarse la citada caja registradora con más de 300 euros. Pero no conformes con dicha acción, el joven que portaba la patacabra trató de romper la máquina recreativa del local para llevarse el dinero de la recaudación. Sin embargo, no consiguió su objetivo y abandonó la cafetería tras golpear con la mencionada herramienta al trabajador víctima del asalto. Hoy está previsto que pasen a disposición judicial.