Pablo Egiluz, el padre de Hodei Egiluz,mostró su "inmenso dolor" después de que la Fiscalía de Amberes les haya comunicado que el cadáver localizado el pasado 11 de febrero en el río Escalda es de su hijo y pidió a las autoridades belgas el esclarecimiento de las causas de la muerte del joven vizcaíno. Además, afirmó que, "en su fuero interno", siempre albergaron la esperanza de que Hodei "apareciese vivo para regresar a casa".

En una rueda de prensa ofrecida en el Ayuntamiento de Amberes, Pablo Egiluz, que estaba acompañado de su esposa, Koro Díaz, mostró el "inmenso dolor" que les aflige en estos momentos tras conocer que su hijo había aparecido muerto en el río de Amberes.

"Queremos respuestas. Solicitamos el esclarecimiento de las causas de su muerte y seguimos pidiendo la colaboración de las autoridades belgas para aclarar las circunstancias que rodean su desaparición", destacó.

Tras señalar que "es muy duro e imposible de describir con palabras" cómo se sienten, reconoció que, "en su fuero interno", siempre albergaron la esperanza de que Hodei "apareciese vivo para regresar a casa junto a nosotros".

"Cada día que pasaba se nos hacía más difícil creerlo, pero nunca renunciamos a ello. Ahora que sabemos que es Hodei, reiteramos la necesidad de hallar respuestas y luz a aquella noche del 19 de octubre de 2013 (cuando desapareció su hijo",subrayó, para reclamar, de nuevo, "el apoyo de las instituciones belgas".

Además, los padres de Egiluz quisieron expresar su agradecimiento "más sincero" a las miles de personas y a la opinión publica, en general, que les han acompañado "desde octubre de 2013". "Sin cada uno de vosotros y vosotras, sin vuestro apoyo incansable, no hubiésemos llegado hasta aquí. Gracias de todo corazón, eskerrik asko", apuntó.