La madre del hombre de 39 años que hoy ha fallecido tras ser detenido por los Mossos d''Esquadra y la Policía Local de Cunit (Tarragona) ha denunciado que su hijo ha fallecido porque siete agentes le han asfixiado al echársele encima para reducirle, cuando ya estaba tumbado en el suelo.

Un hombre de 39 años y con una cincuentena de antecedentes ha fallecido esta mañana en Cunit cuando iba a ser detenido, momento en el que, según la Policía, ha sufrido un paro cardiorrespiratorio.

Según la versión de la policía catalana, los agentes han intentado reducirle pero el hombre ha opuesto mucha resistencia y se ha mostrado muy alterado y agresivo y, en el transcurso de la detención, ha sufrido una parada cardiorrespiratoria.

En declaraciones a Efe-TV, la madre de la víctima ha explicado que su hijo, muy corpulento y con un peso de 104 kilos, estaba en la calle con su mujer y otros miembros de su familia cuando los agentes se le han quedado mirando.

"Han hablado, me lo han cogido, lo han esposado y le han pegado a mi marido una patada, cuando se dirigía hacia un agente que le iba a pegar con una porra a mi hijo. Entonces siete agentes se han echado encima de él. Siete personas. Me lo han asfixiado", ha denunciado la mujer.

Según el relato de la madre, cuando los agentes han visto que el detenido "cambiaba de color", al estar ya reducido en el suelo, han avisado a su esposa, que le ha dado la vuelta y les ha advertido que "estaba todo morado".

Entonces los agentes le han intentado reanimar dándole golpes en el pecho y avisando a los equipos sanitarios, si bien no han podido salvarle la vida. "Se lo han cargado ellos, quiero justicia", ha exclamado la mujer.

Varios miembros de la comunidad gitana, a la que pertenece la víctima, se han acercado a Cunit para mostrar su apoyo a la familia del fallecido.