El alcalde de Arona, José Julián Mena, manifestó ayer que ahora "toca hacer todas las investigaciones y buscar todas y cada una de las responsabilidades" por el derrumbe del edificio Julián José, en Los Cristianos. En esa línea, el regidor comentó que se realizarán las "pesquisas y trabajos técnicos para determinar todas estas cuestiones que, igual que ustedes se las están preguntando, también me las pregunto yo".

Tras más de diez horas de espera por la comparecencia del alcalde y técnicos que dirigen las operaciones de rescate, eso fue lo único que el regidor aronero manifestó sobre la investigación iniciada desde la mañana del jueves por la Brigada de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) de la Comisaría del Sur.

El esclarecimiento del caso tardará aún muchos días. En la jornada de ayer, no se tomó declaración a ninguna persona más.

Sin embargo, se culminó la localización y rescate de los cuerpos de las siete personas que no habían sido localizadas desde la mañana del pasado jueves. Ya están identificadas tres de las personas fallecidas (las tres españolas) y el consistorio solo ha tenido autorización para facilitar la identidad de dos de ellas. Una es la asturiana Flor González González y la segunda persona identificada es Antonio González Beltrán, un hombre de 52 años. La filiación de este último fue posible porque su huella digital se halla en su documento nacional de identidad. González Beltrán era subdirector de un hotel de Las Américas, estaba separado y era padre de dos hijos veinteañeros. Además, era hijo de un conocido vecino de Los Cristianos.

Mena señaló que la investigación administrativa y policial descarta que pueda haber más víctimas entre los escombros. El oficial jefe del Consorcio de Bomberos de Tenerife, Salvador Reyes, explicó que en un desplome como el registrado en el edificio Julián José, que definió como "tipo sándwich", las posibilidades de supervivencia si una persona queda entre las plantas son "casi nulas", ya que la altura entre techumbres de diferentes plantas apenas es de 25 o 30 centímetros.

Sobre la causa que retrasó las previsiones de recuperación del último cadáver, Reyes comentó que se debió a que uno de los perros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que detecta a personas muertas se hallaba muy cansado (una circunstancia que merma su eficacia en estas situaciones) y eso le llevó a marcar y a dar varios avisos no fiables. Finalmente, se decidió aplicar un criterio marcado desde el principio por los profesionales y se pudo localizar al último hombre que faltaba por hallar.

Uno de los procedimientos seguidos por la UME y los bomberos para localizar a víctimas fue disponer de un plano del edificio y, junto a la presidenta de la comunidad, Ánima Marrero, determinar en qué zona del edificio residían cada uno de los "no localizados". Con esa base se determinó en qué lugar de la casa podían estar esas personas a esas horas de la mañana.

La UME recogió ayer todo el despliegue instalado desde mediodía del pasado jueves y regresó a su base en Los Rodeos. En el lugar del desplome quedarán trabajando diversos recursos, como una dotación de los Bomberos de Tenerife con un camión llamado bomba urbana nodriza; Protección Civil, Policía Local de Arona, Cuerpo Nacional de Policía, así como un retén de ambulancias.

El director del operativo de seguridad e ingeniero municipal, Julio Calzadilla, y Salvador Reyes realizarán un análisis de cómo se van a remover los escombros para su retirada definitiva. Posteriormente se determinará cómo se tirará la parte del inmueble que aún queda en pie, con el objetivo de no dañar a los edificios colindantes.

En la jornada de ayer, los Reyes de España enviaron un comunicado de apoyo a las familias de las víctimas mortales, así como al pueblo de Arona en unos momentos tan complicados.

Los Reyes enviaron un telegrama al alcalde de Arona en el que Felipe VI y la reina Letizia manifiestan, ante la tragedia, su "profundo sentimiento de pesar" y su "cariño y solidaridad", al tiempo que transmiten a las familias afectadas su "apoyo y cercanía en estos momentos de tristeza". Además, municipios como Adeje y Granadilla de Abona se han sumado a otros y al Cabildo declarando luto oficial.