La Fiscalía solicita una condena de 35 años de prisión para Carlos Gaspar Hernández, el acusado de matar a su expareja, Iris Francés, en el barrio de El Sobradillo en octubre del año pasado. La víctima había denunciado varias veces a su agresor, pero no obtuvo la orden judicial de alejamiento del hoy procesado, ya que este trabajaba en una gasolinera a unos 50 metros de la vivienda de la fallecida.
El representante del Ministerio Público solicita una pena por el delito de asesinato de Iris Francés y por el intento de homicidio de la madre de la víctima mortal, que trató de auxiliarla.
El juicio por este caso se desarrollará con un Tribunal de Jurado en la Sección V de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife.
La vista está previsto que comience el miércoles de la próxima semana, 13 de julio, y que finalice dos días más tarde.
Iris Francés, de 35 años, falleció en la noche del 22 de octubre al recibir diversas puñaladas en la confluencia de la avenida de Los Majuelos con la calle Majano.
La madre de la víctima se interpuso entre el agresor y su hija, por lo que también recibió tres heridas de arma blanca.
El desenlace trágico tras la ruptura de la pareja era temido por los familiares de Iris. La fallecida era madre de tres hijos, que tuvo en común con Carlos Gaspar Hernández. La hija mayor de ambos, de 10 años en el momento de los hechos, preguntó a sus familiares por qué su progenitor le había dicho que se iban a quedar sin madre y sin padre.
Tras el asesinato de Iris Francés, su padre le preguntaba por qué la autoridad judicial no otorgó una orden de alejamiento en favor de su hija.
Supuestamente, según familiares de la víctima, esta carecía de testigos que ratificaran su testimonio ante la juez correspondiente.
Una de las certezas es que el presunto autor del asesinato y el intento de homicidio trabajaba en una estación de servicio situada a escasos metros de la casa en la que residía la fallecida, junto a sus padres.
El día de los hechos, poco antes de las once de la noche, Gaspar tocó el claxon de su coche e Iris salió corriendo hacia la avenida de Los Majuelos. El procesado presuntamente usó un cuchillo grande de cocina para propinarle varias puñaladas en el abdomen.
El suceso ocurrió aproximadamente dos años después de la separación de la pareja.
las claves
La víctima del asesinato denunció en varias ocasiones a su expareja por sentirse acosada a finales del año 2014. Semanas antes de su muerte, alertó a la Policía Local que sufrió amenazas y una lesión leve.
La noche del 22 de octubre del pasado año, el acusado atacó con un cuchillo de cocina a Iris en la avenida de Los Majuelos.