Las autoridades italianas han rebajado este miércoles a 23 el balance de muertos tras un choque frontal de dos trenes en el sur del país, según ha informado el diario ''Il Sole 24 Ore''.

El entierro de los fallecidos se celebrará, previsiblemente, este sábado. El siniestro, que tuvo lugar este martes, ha dejado además 52 heridos, de los cuales 24 están ingresados en centros hospitalarios, ocho de ellos en estado crítico.

El Cuerpo de Bomberos ha finalizado su intervención en el lugar del accidente, tras haber retirado todos los vagones.

El profesor Franco Introna, de Medicina Forense, en una rueda de prensa con el presidente de la región de Puglia, Michele Emiliano, ha confirmado que la cifra de 27 muertos publicada el día anterior era incorrecta. Por su parte, el fiscal de Trani, Francesco Giannella, ha confirmado que el balance es de 23.

El siniestro tuvo lugar este martes poco después de las 11.00 entre las localidades de Corato y Andría, en una zona de vía única por la que pasan cada día decenas de convoyes.

El alcalde de Corato, Massimo Mazzilli, ha lamentado en Facebook el desastre y ha explicado que es "como si un avión se hubiese estrellado". Las imágenes aéreas difundidas por las autoridades muestran la parte frontal de ambos convoyes totalmente destruida y restos esparcidos en un amplio radio de metros.

El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ha interrumpido la visita que estaba realizando a un museo de Milán para viajar a Roma y seguir desde la capital las informaciones sobre el accidente. "No vamos a parar hasta esclarecer lo que ha pasado", ha subrayado Renzi, que también ha querido mostrar su apoyo a los familiares de las víctimas.

La empresa responsable de la infraestructura, Ferrotramviaria, ha señalado que todavía es "pronto" para saber las causas de este siniestro. "Una cosa es cierta: uno de los dos trenes no debía estar allí", ha dicho el director general de la agencia ferroviaria, Massimo Nitti.