Un operativo conjunto de la Agencia Tributaria y la Policía Nacional ha conseguido desarticular una organización dedicada a la producción de tabaco de contrabando con capacidad para manufacturar hasta 26 toneladas de picadura.

Según un comunicado de la Agencia Tributaria, en la operación han sido detenidas siete personas y se han intervenido un total de 1.164 kilos de tabaco picado dispuesto para su consumo.

Además, se localizaron envases de almacenaje y distribución que contenían restos de picadura que podían elevar la capacidad operativa de manufacturación de esta organización hasta las casi 26 toneladas de picadura.

Las investigaciones comenzaron hace varios meses al tener conocimiento de la existencia de una organización dedicada al contrabando de tabaco asentada en la localidad de Écija (Sevilla).

A raíz de las investigaciones se pudo determinar que el modus operandi utilizado por la organización consistía en la introducción de grandes cantidades de hojas de tabaco procedentes de otros países como Polonia, Bangladesh e India, que se almacenaban en naves de polígonos industriales de Écija.

Posteriormente, las hojas de tabaco eran manipuladas, preparadas y envasadas para ser comercializadas a través de internet y servicios de mensajería por toda España.

Conforme avanzaba la investigación se logró averiguar que la organización estaba utilizando varias naves del Polígono Sedesa de la localidad astigitana, donde presumiblemente estaban almacenando importantes cantidades de hojas de tabaco importadas de otros países.

Ante la llegada a una de las naves investigadas de varios vehículos industriales que salían de la misma minutos después, presumiblemente cargados de tabaco, se decidió realizar una inspección de uno de ellos, en cuyo interior se encontraron varias bolsas negras de basura que contenían 200 kilos de picadura de tabaco, que fueron intervenidas.

Tras esta aprehensión se inspeccionó el resto de las naves relacionadas con la organización y se localizaron 884 kilos de picadura de tabaco, así como 124 envases vacíos con restos de picadura, con una capacidad de 200 kilos cada uno, por lo que los investigados podrían llegar a manejar un total de 24.800 kilos.

También se encontró envasado de la picadura de tabaco para su posterior distribución y máquinas para la elaboración en un piso utilizado por los ahora detenidos.

En la operación, que sigue abierta, han sido intervenidos seis vehículos, dos de ellos de alta gama, así como abundante documentación.