Agentes del Cuerpo Nacional de Policía, de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife, de la Guardia Civil y de la Policía Local de Tacoronte buscan desde la tarde de ayer a los ocupantes de un Fiat 500 de color negro que presuntamente están implicados en, al menos, dos hurtos en joyerías de dichos municipios.

El primer delito tuvo lugar en la joyería Trujillo, en la céntrica avenida santacrucera de La Salle. Dos individuos entraron en el establecimiento y solicitaron ver un muestrario de alhajas y, en un descuido del encargado del local, sustrajeron todos los efectos de valor que pudieron del paño en que les fue mostrado.

Después, los autores del robo se subieron en un turismo Fiat 500, donde lus esperaba otro compinche, y emprendieron la huida por la avenida Tres de Mayo.

Desde el primer momento, las fuerzas de seguridad ya disponían de una matrícula.

Pasado un rato, las fuerzas de seguridad recibieron una segunda alerta por un robo similar.

En este caso, presuntamente los ocupantes del mismo vehículo cometieron otro robo en un establecimiento de la calle Durazno, esta vez en el municipio de Tacoronte.

Los ladrones supuestamente pidieron que se les mostrara una esclava y la sustrajeron. Dicho objeto está valorado en unos 1.400 euros.

Las fuerzas de seguridad trabajan con la hipótesis de que los autores son vecinos de Añaza.

Los agentes trataron de visualizar las cámaras del local de Santa Cruz para tratar de identificar, localizar y arrestar a los implicados en los dos robos.