Las autoridades mexicanas elevaron hoy a quince los cadáveres hallados esta semana en el río Lerma, en los límites del occidental estado mexicano de Jalisco con Michoacán.

El Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses explicó que doce cuerpos fueron encontrados en el municipio de Jamay (Jalisco), dos en Cojumatlán de Regúles (Michoacán) y un último en Briseñas (Michoacán).

El fiscal de Jalisco, Eduardo Almaguer, ya había revelado el jueves que tenía contabilizados nueve cadáveres -ocho hombres y una mujer-, por lo que en las últimas horas la cifra aumentó en seis.

Los 12 cuerpos encontrados en Jamay presentaron heridas por armas de fuego, y entre ellos habría dos mujeres.

Según las primeras necropsias, todo parece indicar que las personas llevarían entre 72 horas y una semana muertas, en tanto que otros cuerpos aparecieron descuartizados.

Los cadáveres fueron encontrados flotando en la desembocadura del río al Lago de Chapala, a la altura del municipio de Jamay, pero se desconoce el punto exacto en que fueron abandonados, informó en su momento el fiscal.

El funcionario indicó que no hay denuncias de secuestro en esa zona del estado, por lo que la Fiscalía trabaja en conjunto con las autoridades de los estados vecinos de Michoacán y Guanajuato para determinar si tienen registro de personas desaparecidas.

México cerró 2015 con un registro oficial de 27.887 personas en paradero desconocido.