La Guardia Civil finalizó la "operación Hada Negra", hecha por el Equipo Contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de Santa Cruz de Tenerife, contra una banda dedicada a la introducción de heroína y cocaína por medio de correos humanos en Canarias. El grupo desmantelado tenía conexiones con otras organizaciones asentadas en Holanda, Bélgica, Rumania, Francia, Senegal y Brasil, así como en Valencia y Madrid.

El servicio se inició en febrero de 2016, tras un minucioso análisis de los datos relacionados con ese tipo de tráfico de drogas.

La investigación se desarrolló en varias fases. En un primer momento, se descubrió una sociedad compuesta por líderes del narcotráfico nigeriano asentados en Tenerife, Madrid y Valencia, que financiaban las operaciones de introducción de droga en España. A través de conexiones con otros miembros asentados en Brasil, Francia y Rumanía, realizaban envíos de cocaína valiéndose de correos humanos, los cuales eran reclutados por un líder de la organización asentado en Valencia. Gracias a la colaboración internacional con la DEA de Estados Unidos, Policía de Brasil y coordinación con Unidades de la Guardia Civil, los agentes detuvieron al correo humano a su llegada a Valencia procedente de Río de Janeiro con más de 900 gramos de cocaína en su organismo.

El líder nigeriano residente en Valencia, tras percatarse de la detención, pretendió huir hacia países nórdicos para evitar la acción de la justicia. Pero el EDOA hizo las acciones policiales necesarias para que se procediera a su detención en el aeropuerto de Barcelona cuando pretendía huir.

Otro hito fue la localización de otro implicado afincado en Madrid que realizaba los contactos con una organización localizada en Bélgica y Holanda y que suministraba la heroína a los correos humanos que se desplazaban hasta esos países para que les facilitaran la sustancia a transportar hasta España, concretamente a Tenerife. A su vez es localizado el encargado de recibir la heroína en la Isla, para, junto con otros líderes de la organización criminal que operaban en el Sur de Tenerife, proceder a su distribución al resto de la jerarquía. Los investigadores establecieron un dispositivo de vigilancia sobre su domicilio, puesto que el correo humano que debía llegar solía valerse de diferentes identidades falsas para evitar los controles aeroportuarios de las fuerzas de seguridad. Una vez se supo que el correo humano habría efectuado la entrega, se procedió a realizar una entrada y registro en el domicilio de esta persona en El Fraile. Los agentes hallaron casi 1.500 gramos de heroína y fue arrestado el 10 de mayo de 2016.

Como consecuencia de esta detención fue necesario proceder a la ubicación del correo humano que hizo la entrega, así como la persona que gestionó toda la operación desde Madrid. El día 16 de mayo se realizaron dos entradas y registros en el municipio madrileño de Fuenlabrada, donde se detuvo al líder de la organización en Madrid. Pero dicho correo humano huyó un día antes, siendo localizado y detenido en Torrevieja el 17 de mayo, gracias a la colaboración del Equipo Territorial de Policía Judicial de la Guardia Civil de Alicante. Con las incautaciones de heroína realizadas, los investigadores estiman haber sacado del mercado ilícito alrededor de 8,5 millones de dosis de heroína y 18.000 dosis de cocaína. Con la venta de esa droga, la organización habría obtenido ganancias superiores al millón de euros. En la operación ayudaron agentes de los grupos de Patrimonio y contra las Personas de la Policía Judicial de Santa Cruz; Policía Judicial de Las Américas y Granadilla; las secciones fiscales del Reina Sofía y Los Rodeos; el GRS de Canarias; Grupo Cinológico de Tenerife y la Unidad de Seguridad Ciudadana de Santa Cruz.