La mujer cuya hija, de 40 años y discapacitada, se encontró en una situación lamentable, rodeada de excrementos y orines en la vivienda donde habitan en Alguazas y en un estado de desnutrición, ha acudido a la consulta de Medicina General para que se evalúe su estado mental.

En el caso de que no esté en sus plenas facultades mentales, el Consistorio estudiaría su incapacitación, ya que hasta entonces ha estado al cuidado de su hija y siempre se ha negado a que éste fuera ingresada en un centro.

Así lo ha confirmado a Europa Press el alcalde del Ayuntamiento de Alguazas, Blas Ángel Ruipérez, quien se ha mostrado sorprendido por esta situación, ya que son vecinas del pueblo y siempre han paseando juntas.

La voz de alarma saltó la semana pasada cuando la madre acudió a una cita presencial a Servicios Sociales del Consistorio, ya que tanto ella como su hija son usuarias, y lo hizo en solitario, algo que sorprendió a la asistenta social.

A raíz de esta situación, la trabajadora social decidió fijar una visita al domicilio de ambas. La madre, conocedora de dicha visita, se precipitó a limpiar el inmueble, aunque a la llegada de los Servicios Sociales se observaron restos de excrementos y orines por las habitaciones.

En ese momento se dio aviso a la Guardia Civil, cuyos agentes se vieron en la obligación de ponerse unas mascarillas para entrar a la vivienda, debido al fuerte olor que de la misma emanaba.

La hija se encontraba en una situación "precaria" y a pesar de su delgadez, se comprobó que su estado era de desnutrición, por lo que se evacuó al hospital Morales Meseguer para realizarle un examen médico más exhaustivo, quedando a cargo de su hermano.

Por su parte, la progenitora, que tiene más de 70 años, ha acudido al médico para que se examine su estado mental, ya que, en opinión del alcalde, su actitud es "rara, porque es la primera vez que ocurre esta situación y siempre ha cuidado de su hija".