El Gobierno boliviano decidió ayer retirar el permiso de operaciones de la aerolínea Lamia y suspender a las autoridades del sector aeronáutico mientras se investigan las causas que llevaron a permitir el despegue del avión que se estrelló el lunes en Colombia, en el que viajaba gran parte de la plantilla del Chapecoense.

La decisión afecta a las principales autoridades de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea, anunció el ministro de Obras Públicas y Servicios, Milton Claros.