La Policía desarticuló en Madrid una banda de aluniceros especializada en sustraer máquinas expendedoras de tabaco, en una operación en la que detuvo a diez personas a las que se les atribuyen 66 hechos delictivos cometidos desde julio.

Las investigaciones sobre este grupo, dedicado al robo con fuerza de locales comerciales, condujeron a los agentes hasta otros jóvenes que sustraían camiones y remolques con sus cargas completas. Ambos grupos eran liderados por uno de los detenidos, que siempre recibía una parte.