Los nueve detenidos en la operación de la Guardia Civil contra el narcotráfico que permitió la intervención de 1.800 kilos de hachís en un barco pesquero el pasado fin de semana pasaron en la mañana de ayer a disposición de la autoridad judicial.

Los arrestados, entre los que figuran personas de nacionalidad española y marroquí, fueron trasladados hasta el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Granadilla de Abona.

Los acusados fueron llevados en un furgón de traslado de reclusos, así como en coches camuflados del Instituto Armado y en un patrulla todoterreno.

La investigación fue desarrollada por agentes del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Policía Judicial de la Guardia Civil.

Los funcionarios hicieron un seguimiento a la tripulación de la embarcación pesquera "Asaka Primero", que tiene su base en el puerto de Tazacorte, en La Palma.

Todos ellos, vecinos de la Isla Bonita, son muy conocidos por los pescadores que tienen su base en Los Cristianos, ya que, a veces, coinciden faenando en las mismas aguas.

El pasado viernes, el "Asaka Primero" estaba en el citado puerto pesquero de Los Cristianos y, al igual que otras embarcaciones del Sur de Tenerife, partió supuestamente hacia aguas próximas a Fuerteventura.

Eso, en principio, es lo que manifestaron a las gentes de la zona.

Tras cargar el hachís, el patrón y dos marineros regresaron hacia las islas occidentales. Una embarcación de las fuerzas de seguridad consiguió abordar al "Asaka Primero" en alta mar con la mencionada cantidad de hachís.

Otras personas fueron arrestadas a las 7:00 horas del pasado domingo en la calle El Remo, en Los Abrigos.

Los gritos de los arrestados, que fueron engrilletados y colocados boca abajo en el asfalto, llamaron la atención de los vecinos de este pueblo costero.