Un joven hispano-marroquí con antecedentes penales en España confesó hoy ante un tribunal alemán la violación en octubre pasado en Duüsseldorf, en el oeste de Alemania, de una anciana de 90 años.

En una declaración leída por la defensa ante la Audiencia Provincial de Düsseldorf, el acusado, Souhayl M., de 19 años, reconoció los hechos que se le imputan, aunque no dio más detalles.

"Cuando llegué a casa, no podía creer lo que había pasado", cita la radiotelevisión pública regional WDR al autor confeso.

El español de origen marroquí entró cabizbajo a la sala del tribunal donde tuvo lugar la lectura de la acusación y evitó cualquier tipo de contacto visual cuando la fiscal relató los hechos que se le imputan y los daños sufridos por la víctima, que tuvo que ser tratada en un hospital.

El 2 de octubre pasado, la anciana había acudido como cada domingo a una iglesia que se encuentra en el casco antiguo de la ciudad, cuando de regreso fue arrastrada por el acusado al pasillo de un patio interior, amenazada y violada.

Cuando un viandante se percató de la situación, el agresor dejó a la víctima y emprendió la huida.

Según el acusado, que trabajaba como camarero ocasional en un local de Düsseldorf, la noche antes de lo hechos estuvo bebiendo con amigos y consumió cocaína y ketamina.

El ADN hallado en el lugar de los hechos permitió dar con el autor de la violación, que llegó a Alemania en mayo de 2016.

El joven, que durante la vista contó con una traductora de alemán, había estado recluido por robo en un centro de menores en Alemania y ya antes, en España, había sido condenado por varios delitos, relacionados con las drogas o por hurto.

Después de que en España lo condenaran a cuatro meses de servicios sociales, el hombre huyó primero a Marruecos y después a casa de un conocido de su padre en Alemania.

La anciana, que ya ha cumplido 91 años, prestará declaración en la próxima vista como testigo y a puerta cerrada.

Está previsto que la sentencia se dicte el próximo 7 de abril.