La pirámide alimenticia ha cambiado y se ha adaptado a los tiempos actuales. Basándose en los nuevos hábitos de la sociedad, la demografía y, como no, los gustos de los ciudadanos, la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), con la colaboración de más de 100 expertos en alimentación y salud pública, ha decidido añadir un nuevo estrato y completar y mejorar los que ya se conocían.

Ahora, debajo de la anterior base donde se encontraban los alimentos basados en cereales, trigo y harinas, se encuentra un nuevo estamento llamado "estilos de vida saludables". En él, la SENC añade la realización de actividad física diaria, el equilibrio emocional, el balance energético y la utilización de técnicas culinarias saludables a la hora de cocinar que se unen a la recomendación ya conocida de beber entre cuatro y seis vasos de agua al día.

El ejercicio debe ser de 60 minutos o 10.000 pasos al día, según afirma Javier Aranceta-Bartrina, presidente del Comité Científico de la SENC y coordinador del Grupo Colaborativo de las Guías Alimentarias. Aranceta también recuerda que la alimentación tiene efectos en el equilibrio emocional. "Cuando comemos mal, este equilibrio será inestable". El doctor asegura, por ello hay que "escoger" lo que se come "pensando en la salud".

En cuanto al balance energético, "si comemos más deberemos movernos más", insiste Aranceta. La última incorporación novedosa de la nueva base es la utilización de técnicas culinarias saludables. Javier Aranceta-Bartrina, recomienda especialmente "cocinar al vapor" pues es la mejor manera de no perder las propiedades nutritivas y vitamínicas de los alimentos.

Esta nueva pirámide, no obstante, no solo añade estos consejos, sino que actualiza otros que se habían quedado desfasados. De esta manera, los productos derivados de cereales, trigo y harinas, mejor si son integrales o de grano entero. A la ya conocida recomendación de comer cinco piezas de fruta y verdura al día, se añade la utilización de aceite de oliva virgen extra. Asimismo recuerda que las proteínas, mejor si provienen de pescados, champiñones, carnes blancas o huevos; los productos lácteos mejor semidesnatados, y las carnes rojas y bollería, mejor si se consumen solo de forma ocasional.

A la bandera de los suplementos

Se debe destacar la mención explícita, en la cúspide de la pirámide alimenticia, de los suplementos nutricionales, como los folatos o la vitamina D. Según explicó Javier Aranceta, esta opción, que aparece por primera vez en las guías oficiales de la SENC, debe ser valorada de forma individual por parte de un especialista antes de ser consumida. El presidente del SENC puso el ejemplo de las mujeres en edad fértil, donde es recomendable la suplementación. No obstante, el presidente del comité científico de la SENC advirtió que "hay una gran cantidad de personas que toman de manera autónoma y sin consultar suplementos alimenticios y eso no debería hacerse". A veces, continuó, pueden producirse interacciones importantes entre estos productos y los fármacos indicados, por lo que su consejo es "siempre consultar con un profesional de la salud antes".