Agentes de la Policía Nacional destinados en la capital tinerfeña detuvieron la pasada semana a un hombre de 33 años de edad, de nacionalidad española y con nueve antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de desórdenes públicos, tras realizar una llamada anónima a la sala operativa del 1-1-2 para comunicar la existencia de una bomba en un conocido centro comercial de Santa Cruz de Tenerife.

Los hechos sucedieron el pasado día 31 de mayo, cuando el ahora acusado realizó varios avisos al servicio único de emergencias en las que afirmaba falsamente de la colocación de un artefacto explosivo en un edificio muy concurrido de la ciudad.

Con dicha acción, el arrestado provocó la movilización de numerosos recursos policiales al con el objetivo de realizar el correspondiente registro del lugar para intentar localizar la bomba, aunque finalmente no se encontró.

Las investigaciones desarrolladas por los agentes dieron sus frutos el pasado 8 de junio, con la identificación, localización y detención de un varón de 33 años, residente en La Laguna, como presunto autor de los hechos descritos.

Instruido el oportuno informe, el apresado fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción que está en funciones de guardia en la capital tinerfeña.

La intervención policial fue llevada a cabo por policías nacionales adscritos a la Comisaría Provincial de Santa Cruz de Tenerife.