La Fiscalía pide que se imponga un total de doce años de prisión a A.C. por el intento de asesinato de su pareja, a la que apuñaló en varias ocasiones con unas tijeras y un cuchillo. El Ministerio Público también solicita una orden de alejamiento de medio kilómetro durante 22 años y el pago de 6.000 euros a la víctima. El ciudadano de nacionalidad rumana mantenía una relación sentimental con la mujer, de la que habían nacido dos hijos de 9 y un año, con los que convivía en una vivienda en Granadilla. El juicio por un supuesto delito de asesinato en grado de tentativa tendrá lugar hoy en la Audiencia Provincial.

En el relato de los hechos, la Fiscalía indica que, semanas antes, el supuesto agresor había demostrado un comportamiento obsesivo de control hacia su mujer con sospechas continuas por celos. El 12 de agosto de 2016, mientras la afectada dormía la siesta y provisto de unas tijeras, se abalanzó sobre ella y se las clavó de forma reiterada en la cabeza y el cuello en presencia de su hijo mayor.

Finalmente, la víctima logró escapar, coger las tijeras y lanzarlas por la ventana, al tiempo que pedía al menor que buscara ayuda. El supuesto agresor acudió entonces a la cocina y volvió con un cuchillo que clavó en distintas partes del cuerpo de su compañera. Los avisos dieron lugar a que dos vecinos entraran en la casa, momento en el que el procesado salió de la misma con el hijo menor en los brazos, no sin antes clavar el cuchillo por última vez hasta el punto de romperlo. Por último, los ciudadanos consiguieron que dejara el bebé y retuvieron al procesado hasta que llegó la policía y lo detuvo. Como consecuencia de la agresión, la mujer sufrió lesiones consistentes en traumatismos craneales, faciales, torácico, múltiples cortes en la cabeza y cuello con hematomas, escoraciones, una herida en la clavícula de ocho centímetros de profundidad y otra de cinco en el brazo izquierdo. Igualmente, el presunto agresor causó una herida punzante en el brazo y corte en el codo del brazo derecho, en la rodilla, incisiones en el tórax, cuello y cadera derecha, que precisaron que fuera intervenida de urgencia.

La Fiscalía concluye que estas lesiones pusieron a la mujer en riesgo de muerte y, de hecho, para curarlas fue preciso emplear quince días, de los que siete permaneció hospitalizada. El Ministerio Público también solicita que el procesado sea inhabilitado para ejercer la patria potestad.