La Fiscalía de Tenerife solicita cuatro años de prisión para los ciudadanos británicos, G.W.H. y S.W.H., padre e hijo respectivamente, por considerarlos los supuestos autores de un delito de homicidio por imprudencia grave, al matar a puñetazos a un turista en una avenida de Costa Adeje.

El Ministerio Público también pedirá durante el juicio que celebra el lunes el Juzgado de lo Penal número cuatro, que abonen una indemnización de 90.000 euros a la esposa del fallecido y la cantidad que se fije en sentencia a sus hijos.

Los hechos se produjeron sobre las 1:40 de la madrugada del 5 de mayo de 2016 cuando la víctima se encontraba en un bar en compañía de su esposa, los dos en estado de embriaguez.

En ese momento se sentaron a su lado los supuestos agresores, quienes, cuando el matrimonio se levantó de la mesa, iniciaron una discusión para luego comenzar a agredirse mutuamente con los puños.

La víctima cayó al suelo, por lo que los dos acusados aprovecharon la desventaja en la que se encontraba y siguieron golpeándole de forma repetida en la cara, mientras el otro lo sujetaba por el cuello con el antebrazo inmovilizándolo.

El fallecimiento se produjo de forma inmediata después de la agresión y tuvo como origen una descompensación previa de patología cardiaca isquémica aguda que padecía, entre otras.

A todo ello se suma también el consumo previo de alcohol, que precipitó el fallecimiento por fibrilación ventricular y edema agudo pulmonar.

Igualmente, el afectado presentaba lesiones a nivel facial derecho y pericraneo que tienen su origen en contusiones leves y moderadas que no justificaban por sí mismas el fallecimiento. La víctima padecía también una hepatomegalia previa.