La Audiencia Provincial ha impuesto cuatro años de prisión a A. F. M. G., por un delito de abusos sexuales del que fue objeto una mujer con discapacidad que residía en un centro de Los Realejos.

La sala da por probado que a finales del mes de octubre de 2015, el acusado se dirigió a dos hermanas que eran usuarias de este recinto. Una presentaba un 75% de encefalopatía epiléptica y deficiencia mental media y la otra un 76% de deficiencia mental media y trastornos de conducta.

El hombre las convenció para lo acompañaran a su domicilio, donde abusó de una de ellas.

La Audiencia estima que en este caso "nos encontramos ante una víctima vulnerable en razón a su discapacidad". La Sala entiende que el acusado conocía la situación de desvalimiento de la joven internada en un piso tutelado y que el abuso se llevó a acabo aprovechándose de su discapacidad.

Durante la vista oral celebrada recientemente, el Tribunal interpretó que el acusado reconoció la autoría de los hechos ya que se acogió a su derecho a no declarar. Por su parte, el testimonio de la víctima resultó para los jueces "totalmente creíble, ya que relató claramente lo ocurrido". Además, su hermana declaró que fue testigo de los abusos.