El Tribunal Supremo ha confirmado las condenas de entre 2 y 5 años de cárcel impuestas a cuatro responsables de una estafa continuada a empresarios de Tenerife mediante la inversión en unos activos financieros ficticios denominados "euronotas". Esos activos se ofrecían con un alto rendimiento y supuestamente estaban garantizados por unos yacimientos de oro en Antofagasta de la Sierra (Argentina). Las euronotas, una vez suscritas, serían negociadas con un banco cuya existencia tampoco ha quedado acreditada.