La Guardia Civil ha hallado cerca de la localidad de Lucena del Puerto (Huelva) un terreno vallado donde se encontraban 12 caballos extremadamente delgados, con los huesos marcados y sin apenas musculatura. Uno de los equinos, además, tuvo que ser finalmente sacrificado como consecuencia de una caída que agravó su mal estado.

Un varón ha sido relacionado con estos hechos por un presunto delito relativo a la Protección de la Flora y Fauna y animales tras omitir supuestamente el deber de cuidar a los equinos de su propiedad.

Este operativo se inició en noviembre cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Huelva, según ha informado en un comunicado, hallaron, dentro del marco de la lucha contra el maltrato animal, a unos 28 equinos de diferentes edades y observaron que la finca no presentaba ningún tipo de cobertizo que los animales pudieran utilizar para cubrirse de las inclemencias meteorológicas y ningún tipo de alimento a su alcance.

Tras localizar e identificar al propietario de la finca, realizaron un informe veterinario que evaluaba a siete de los equinos con extrema delgadez y cinco en estado muy delgados según la grasa y masa muscular que presentaban, considerando los agentes que los animales se encontraban en una situación de abandono asistencial pudiendo incluso llegar a peligrar su vida o integridad física.

Una vez autorizado judicialmente y gracias a la colaboración de la Fundación Caballos en Peligro y el Refugio del Burrito, se procedió al traslado de once de los animales a un complejo para su recuperación, aunque uno de los caballos el día del traslado tuvo que ser sacrificado al encontrarlo en muy mal estado debido a las lesiones provocadas por una caída agravada por el estado desnutrido que presentaba.