Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron recientemente en la comunidad autónoma de Valencia a un hombre de 49 años de edad que tenía en vigor dos órdenes de búsqueda e ingreso en prisión por el asesinato de dos compatriotas lituanos en la provincia de Tarragona hace más de tres lustros.
Según un comunicado divulgado en la jornada de ayer por parte de la Jefatura Superior del cuerpo de seguridad en Valencia, la localización del detenido, que llevaba en búsqueda desde el ejercicio 2006, ha sido difícil porque había cambiado legalmente su apellido al casarse.
Uno de los crímenes atribuidos al ahora acusado se produjo, presuntamente, el 14 de enero de 2002, cuando se halló el cuerpo de un hombre en Bot (Tarragona) con signos de violencia.
Las investigaciones llevadas a cabo por el Grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial permitieron averiguar que el sospechoso formaba parte de un grupo organizado, integrado por cuatro personas, todas ellas de origen lituano, dedicadas a extorsionar a compatriotas a los que obligaban a ejercer la prostitución y que habrían participado en la muerte de la víctima hallada en la carretera.
Ese mismo año denunciaron la desaparición de un ciudadano desde Lituania, junto con otros hombres entre los que se hallaba el sospechoso, que habrían viajado hasta España.
Estos datos permitieron que se encontrase el cadáver de la segunda víctima en las montañas que rodean la localidad de Bot, junto a su vehículo, que estaba calcinado.
Las pesquisas llevadas a cabo por parte de los profesionales del Grupo de Homicidios comenzaron al tener conocimiento de que podría hallarse en Valencia el presunto autor del mismo, sobre el que pesaban dos órdenes de detención e ingreso en prisión por parte de la Audiencia Provincial de Tarragona en 2006 y un juzgado de Primera Instancia e Instrucción desde 2009 con motivo de la detención ilegal y asesinato de dos compatriotas suyos.
Los agentes comprobaron la identidad del sospechoso.
El paso siguiente en el trabajo de los funcionarios consistió en la localización del mismo, que se produjo en las inmediaciones de su domicilio.
Y, una vez que los agentes sabían por dónde se movía y residía, procedieron a su arresto como presunto autor de los delitos de detención ilegal, asesinato y extorsión.
El detenido, con antecedentes policiales, pasó a disposición de la autoridad judicial y todo indica que ingresará en prisión en breve, tras las pruebas que aporten los miembros de la Policía Nacional en su informe.