Una mujer de 18 años presentó una denuncia en la madrugada de ayer para informar de que sufrió en la noche del pasado jueves un intento de retención ilegal y violación en su propio edificio de Santa María del Mar, en el municipio de Santa Cruz de Tenerife, por parte de un hombre de mediana edad que la siguió por la calle y se introdujo en su portal.

Los hechos ocurrieron a las 23:25 horas en la calle Tamarán, concretamente en el bloque 11.

La afectada relató en la Policía Nacional que caminaba por una acera de la calle Columbrete y por el lado contrario vio a un varón con una especie de pañuelo en la mano.

Supuestamente, esa persona la siguió hasta que llegaron a la altura del portal del edificio donde reside. Cuando la joven abrió la puerta, detectó que alguien iba detrás de ella, pero, según contó a los agentes, pensó que era otro vecino y no miró atrás.

Empezó a subir las escaleras y, cuando ya se hallaba en la tercera planta, el hombre usó una especie de pañuelo para agarrarla por el cuello y taparle la boca.

Desde ese momento comenzó la situación más tensa, según la afectada, porque el individuo comenzó a arrastrarla escaleras abajo, supuestamente con la intención de retenerla y agredirla sexualmente.

La chica, que tenía las dos manos libres y en una de ellas portaba el móvil, comenzó a dar golpes en las puertas por las que iba pasando.

Según su testimonio ante los funcionarios, cuando era arrastrada, pudo golpear en tres de ellas.

Señaló que, en un momento dado, al delincuente se le soltó una punta del pañuelo y en ese instante pudo comenzar a gritar.

En su ayuda salieron inicialmente una vecina y sus propios padres.

Ante esa circunstancia, el autor del hecho supuestamente salió huyendo hacia la calle.

La denunciante comentó que no pudo verle la cara en ningún momento.

Sin embargo, comenta que era un hombre de 1,80 metros de altura, moreno, delgado, medio calvo y canento.

Respecto a su vestimenta, afirmó que el varón llevaba una abrigo deportivo de color negro, unos vaqueros azul oscuro y unas zapatillas deportivas de color beige.

Agentes de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Distrito Norte tratan de esclarecer este asunto.

No obstante, la difusión de este suceso por las redes sociales y grupos de whatsapp generó ayer una gran alarma social en diversos enclaves del área metropolitana.