La Guardia Civil ha desarticulado una organización internacional criminal de origen iraquí, albanés y español que facilitaba la entrada de inmigrantes a Reino Unido a través de los ferris que parten desde los puertos de Santander y Santurzi (Bizkaia), donde viajaban de polizones.

Según informa la Dirección General del instituto armado, en la operación se ha detenido a siete personas -tres en Santander y cuatro en el País Vasco- en el marco de la Operación Hegira, a quienes se les imputan los delitos de pertenencia a organización criminal y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

Los inmigrantes, en su mayoría albaneses y refugiados procedentes de Irak, Siria, Afganistán y Pakistán, eran trasladados desde lugares de asentamiento hasta Cantabria y Bizkaia donde les proporcionaban alojamiento y les facilitaban el acceso al recinto portuario saltando la valla perimetral.

Posteriormente, les ayudaban a ocultarse como polizones en tráileres, contenedores, caravanas y maleteros de los vehículos estacionados en el aparcamiento restringido de las navieras, a la espera de embarcar en los ferris que parten hacia Reino Unido.

En los registros de los tres domicilios, dos de ellos utilizados como "casas pateras", los agentes encontraron habitaciones numeradas y cerradas con llave donde supuestamente hacinaban a los inmigrantes.

También han incautado numerosos dispositivos telefónicos e informáticos, tarjetas bancarias, tarjetas de remesadoras de dinero y varios documentos de identidad y pasaportes de distintas nacionalidades e identidades.

La Guardia Civil inició esta operación tras percatarse del aumento de albaneses que intentaban acceder al puerto de Santurtzi, así como del incremento del número de personas, que de forma irregular, pretendían acceder a Inglaterra y eran interceptados en algunas ocasiones en España y en otros, a la entrada del país británico.

Tras la investigación, los agentes pusieron de manifiesto la existencia de esta organización ilegal asentada en los puertos españoles que favorecía este modus operandi y que podía estar provocando un efecto llamada.

La operación, de carácter internacional, ha estado dirigida por el Juzgado de Instrucción número 9 de Bilbao y por la Fiscalía Especial de Extranjería y desarrollada por el Grupo de Información de la Comandancia de Bizkaia, con el apoyo de la Jefatura de Información de la Guardia Civil, el Grupo de Acción Rápida y la Guardia Civil de Cantabria, coordinada por Europol.

Asimismo, durante las detenciones y la práctica de los registros han prestado su colaboración dos oficiales de la Policía Federal de Bélgica.