Funcionarios de prisiones intervinieron recientemente 105 gramos de hachís a un interno del centro penitenciario Tenerife II después de que se produjera una comunicación entre el preso y un familiar.

Los hechos ocurrieron el pasado jueves y la localización de la droga fue posible gracias a la realización de una placa radiológica a la persona privada de libertad, ante la sospecha de que pudiese portar algún objeto o sustancia prohibida en el interior de la cárcel que pudiera alterar la normal convivencia en el recinto.