La Guardia Civil detuvo a un hombre de 56 años quien, presuntamente, cultivaba 22 plantas de marihuana de entre 15 y 120 centímetros en el Malpaís de Güímar.

Los agentes detectaron que el individuo se dirigía al lugar con una gorra y una braga que le tapaba la cara. Al hallar a los funcionarios ocultos en un cardonal, en un primer momento los confundió con personas dispuestas a sustraer la droga, por lo que comenzó a increparlos de forma muy airada, pidiéndoles que le explicaran qué hacían allí y expresando que las plantas de marihuana eran de él.

Una vez se percató de que estaba hablando con miembros del Instituto Armado, se quitó la braga y la gorra y dijo que el cultivo no era suyo. Cuando los agentes le solicitaron la documentación para su identificación, el varón intentó huir, siendo alcanzado por los mismos poco después y procediendo a su detención como presunto autor de un delito contra la salud pública.