Dos hombres quedaron absueltos de la acusación de entrar a robar en una casa de La Laguna y agredir al nieto de la dueña cuando los sorprendió. El Juzgado de lo Penal número cinco sentencia que, al haberse presentado los intrusos con la cara tapada, resulta imposible determinar con exactitud que sean los acusados. El robo tuvo lugar el cinco de marzo de 2017 y la dueña señaló en el juicio que ese día la avisaron de que tres personas entraron en su casa, sustrajeron enseres y forzaron la puerta de acceso.

Cuando ocurrieron los hechos, la propietaria no estaba en el domicilio, al igual que su hijo, que vive en el mismo edificio. Fue el nieto quien declaró que en el momento en el que entraba por la puerta del garaje sorprendió a tres encapuchados, con las caras parcialmente cubiertas, lo que impedía su identificación. Uno le pegó un puñetazo y después los tres abandonaron el lugar, por lo que intentó seguirlos y así pudo ver cómo se subían a un coche del que no pudo aportar la matrícula, aunque luego se la daría un vecino. La identificación de uno de los acusados sería aportada también por este último. La magistrada considera que este testimonio es "un tanto confuso" y no cumple los requisitos para concluir en una condena. El testigo declaró que conocía al acusado porque intentó robar en casa de su tío y que a partir de entonces había entrado varias veces en su perfil en una red social. Igual de confusas se estiman sus palabras cuando argumentó que vio al procesado quitarse y ponerse varias veces la prenda con la que cubría su cara y sin embargo asegurar que lo había identificado plenamente. Acto seguido dijo que el supuesto autor del robo tenía gafas y que no sabía que las llevaba. El propio testigo admitió que asociaba la cara del detenido con la de la persona que había robado en la casa de su familiar.

En cuanto al coche, pertenecía a una tía de la novia de otro acusado.