La Policía Local de Santa Cruz de Tenerife detectaron e inmovilizaron hace días un furgón que transportaba una carga que superaba en un 108% el máximo permitido para ese vehículo.

El furgón fue localizado de madrugada cuando se dirigía al puerto y desprendía mucho humo desde el eje trasero y un fuerte olor a quemado. Los agentes detectaron que no disponía de la tarjeta de transporte obligatoria y que el conductor, de 47 años, tampoco posee el permiso de conducción adecuado para el furgón. Los policías escoltaron al vehículo hasta la zona de pesaje del área portuaria, donde se comprobó que la masa máxima autorizada para el mismo es de 5.200 kilos y en la báscula el pesaje arrojó que llevaba 10.840 kilos.

Los agentes se interesaron por la carga que transportaba y su destino, siendo informados de que se trataba de motores y piezas de vehículos procedentes de desguaces que pretendía vender en Marruecos. De hecho, el conductor además de las facturas de compra de dicho material explicó que ese mismo día pretendía embarcar con destino a Cádiz, desde allí por carretera hasta Algeciras y luego trasladarse hasta el país norteafricano también por vía marítima. El furgón fue llevado al depósito municipal de vehículos para ser inmovilizado, comprobar la carga y qué parte de ese transporte fuera transbordado a otro vehículo en las condiciones adecuadas. Además se tramitaron tres denuncias: una por el exceso de peso, otra por carecer de la tarjeta de transporte, ambas remitidas al Cabildo, y otra a la Jefatura Provincial de Tráfico por conducir el vehículo con un permiso que no le habilita para ello.