El joyero asesinado ayer en Carmona (Sevilla) "disponía de un buen dispositivo de seguridad", según ha revelado hoy un familiar de la víctima, indicando que éste tuvo que abrirle la puerta para que el asesino entrase al local.

El familiar, que no ha querido desvelar su nombre, ha dicho a los periodistas, a las puertas del establecimiento, que el homicida desconectó una de las cámaras de la joyería, pero que ésta dispone de "varias cámaras más".

Ha agregado que el fallecido tuvo que abrirle la puerta de su negocio y ha precisado que desconoce si se han sustraído joyas.

Según los vecinos de la zona, sobre las seis de la tarde un coche azul se encontraba en la puerta de la joyería y tres personas estaban en el vehículo.

El cadáver fue descubierto por una hija del fallecido después de que su mujer intentase localizarlo toda la tarde sin éxito.

El cadáver de propietario de la joyería, que acababa de cumplir 60 años, se encuentra en el Instituto Anatómico Forense de Sevilla para que le sea practicada la autopsia.

En recuerdo de la víctima se ha programado un minuto de silencio en la plaza del Ayuntamiento de la localidad sevillana.