Guardias civiles del Destacamento de Protección de la Naturaleza de La Caldera de Taburiente (Seprona) investigan a un varón de 33 años y a una mujer de 41, vecinos de Garafía, por un delito contra la ordenación del territorio.

Están acusados de construir una caseta de madera de 40 metros cuadrados, con un porche destinado a cocina y un baño al aire libre en la parte trasera. Los hechos ocurrieron en el paraje Cueva de Agua, en Garafía. Los implicados carecían de las autorizaciones oportunas y dedicaban el recinto a alquiler turístico. Por requerimiento de los agentes, el ayuntamiento emitió un informe en el que se dice que la actuación carece de los permisos exigibles y que está en suelo rústico de protección paisajística, por lo que no puede ser autorizada.