La Policía Nacional y la Guardia Civil han detenido a los 27 integrantes de una organización que se dedicaba a robar camiones de gran tonelaje para vender su carga, en una operación en la que han esclarecido nueve asaltos, entre ellos uno de 20.000 litros de aceite de oliva.

El grupo actuó en Jerez de la Frontera (Cádiz), El Puerto de Santa María (Cádiz), Lebrija (Sevilla), Madrid (Madrid), Alaquas y Gandía (Valencia) y Albacete, localidades en las que robó camiones aparcados en polígonos industriales para apoderarse de su mercancía, valorada en más de 500.000 euros.

La investigación de la Operación BARBEQUIU se inició a finales de 2017 cuando los agentes identificaron a un grupo de personas que habrían cometido el robo de un camión y su semirremolque, que contenía 20.000 litros de aceite de oliva.

El semirremolque fue recuperado totalmente vacío días después en una urbanización de la localidad de Carmona (Sevilla), según explican hoy la Policía Nacional y la Guardia Civil en una nota de prensa.

Después se produjeron otros dos robos similares en la localidad de Jerez de la Frontera, en los que sustrajeron un tractor camión con semirremolque acoplado que portaba un contenedor que transportaba 540 barbacoas de gas y un contenedor con destino a Pakistán que contenía unos 16.000 litros de aceite de oliva envasados y etiquetados en inglés y con caracteres árabes.

Los vehículos que portaban estos productos fueron y recuperados también en Carmona.

Para investigar estos asaltos se formó un equipo conjunto de la Guardia Civil y Policía Nacional.

Tras varias gestiones, los agentes fueron localizando e identificando a cada uno de los miembros de la organización y asignando a cada componente el rol que desempeñaba y los contactos que utilizaban para colocar la mercancía robada.

En estas pesquisas se recuperaron seis vehículos con su correspondiente carga cuando acababan de ser robados.

La Operación BARBEQUIU ha sido realizada en tres fases.

En la primera de ellas fueron detenidas en Madrid y Sevilla 17 personas e investigadas otras 3, que se encontraban en prisión.

Se llevaron a cabo quince registros en los que se incautaron numerosos efectos procedentes de los robos cometidos, una pistola detonadora modificada para disparar munición real, una pistola bolígrafo, diferente cartuchería metálica, 117 teléfonos móviles, herramientas destinadas al rompimiento y forzamiento de los vehículos, un coche de alta gama, 28.500 euros, un inhibidor de frecuencia, así como un kilo aproximadamente de anfetamina y elementos para su corte y empaquetado y 69 plantas de marihuana.

En la segunda fase fueron detenidas otras tres personas y se realizaron dos registros en los que se incautaron 34 móviles, herramientas destinadas al rompimiento y forzamiento y para realizar copias de llaves, tres inhibidores de frecuencia, una pistola taser para realizar descargas eléctricas, una pistola con la numeración borrada, un revólver con la numeración borrada y numerosa cartuchería metálica.

El 23 de octubre se llevó a cabo la tercera y última fase de la operación en la que se tomó declaración en calidad de detenidos a los dos últimos integrantes de esta red.