La Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha condenado a 23 años de prisión a J.I.D.E., el hombre de 36 años que mató a su novia, de 44 años, en la casa en la que convivían en La Laguna en abril de 2017, por un delito de asesinato con alevosía.

La sentencia, hecha pública este martes y contra la que cabe recurso de apelación, también incluye el pago de 40.000 euros al hermano de la víctima en concepto de indemnización por daños morales, su inhabilitación absoluta y el pago de las costas del proceso.

Como el acusado se encuentra en prisión provisional dada la gravedad de los hechos, la Audiencia Provincial también ha acordado su prórroga hasta la mitad de la pena, dado que hay riesgo de fuga.

Así, se considera probado que el condenado, tras mantener una discusión con su pareja, le golpeó conscientemente en la cabeza y en repetidas ocasiones con un objeto metálico y macizo de tres kilos que le causó la muerte.

La víctima fue golpeada por la parte de atrás de la cabeza y después en la cara, y no pudo ni llegar a defenderse, y la sentencia sostiene que fue asesinada por un "desprecio absoluto a su condición de mujer".

El asesino no presenta ningún trastorno psiquiátrico ni de control de impulsos por lo que los arañazos recibidos por parte de la víctima --que no asumía el final de la relación-- no justifican que le infligiera un traumatismo craneoencefálico.