La nave del taller Motor Valle afectada en la noche del pasado lunes por las llamas en el Polígono del Valle de Güímar contaba con alarma de detección de fuegos, pero carecía de sistema contraincendios. En principio, dicha medida de seguridad hubiera frenado en los primeros minutos los efectos del suceso

Así lo reconoció ayer el concejal de Seguridad de Güímar, Francisco Javier Amador González.

El edil explicó que el hidrante que se encuentra situado en frente del inmueble dañado no estaba operativo y, por ese motivo, los camiones de bomberos debieron cargar agua en puntos de suministro más alejados.

En cualquier caso, Francisco Amador aclaró que, durante las tareas de extinción de las llamas en las instalaciones de Motor Valle "nunca faltó agua".

Sobre el problema del hidrante ubicado frente a Motor Valle, Amador González señaló que ayer se reunió con un representante de la concesionaria del servicio de agua en Güímar para que resuelva esa deficiencia lo antes posible.

A raíz del espectacular incendio registrado antenoche en la manzana 3 del Polígono, el concejal de Seguridad anunció ayer que solicitará una reunión con la alcaldesa de Candelaria, Mari Concepción Brito, y el Luis Domingo Marrero, concejal de Urbanismo e Industria de Arafo, que son los otros dos municipios en los que se asienta el Polígono Valle de Güímar.

El objetivo de ese encuentro será plantear la posibilidad de realizar un inventario sobre las empresas que operan en todo el complejo para determinar qué características y peligros encierra cada una de ellas.

De esa manera, según Francisco Amador, se evitará en el futuro que los bomberos tengan que entrar "a ciegas" en naves con materiales inflamables o depósitos de combustible, por ejemplo.

En Motor Valle quedaron calcinados 22 vehículos y otros 18 se vieron afectados. Al menos dos de esos coches estaban preparados para competición.