La Policía Nacional detuvo en las inmediaciones del aeropuerto del Sur de Tenerife a un ciudadano británico sobre el que pesaba una orden europea de detención y entrega por hasta 29 delitos entre los que se encuentra el tráfico de drogas y el crimen organizado.

Las autoridades judiciales de Edimburgo (Reino Unido) buscaban a este hombre, de 35 años, por su presunta participación en las actividades ilícitas realizadas por una importante organización criminal internacional que, entre 2011 y 2018, operó en varios países, entre ellos España.

El fugitivo se encontraba en el sur de la isla de Tenerife, desde donde llevaba a cabo las actividades de dirección y control del grupo criminal. Debido a las numerosas medidas de seguridad que tomaba, y a la gran cantidad de medios que tenía a su disposición, las labores de investigación no pudieron desvelar su localización hasta fechas cercanas a su detención.