Ni el calor, ni el sol que se registraban a mediodía de ayer en La Caleta fueron impedimentos para que más de 30.000 personas se acercaran a La Enramada y festejasen a San Sebastián, copatrón del municipio de Adeje.

La tradicional ofrenda, que también es un reclamo turístico muy importante, se inició a las 12:00 horas con la misa. Sin embargo, muchos de los peregrinos comenzaron a llegar desde muy temprano al núcleo costero.

De hecho, un buen número de personas realizó el sendero de la Virgen y partió a las 9:00 horas del casco urbano, concretamente desde la iglesia de San Úrsula. Durante los cinco kilómetros que tiene este trayecto, los adejeros daban continuas e incesantes muestras de devoción.

La explosión popular se alcanzó una vez terminó la eucaristía de mediodía y San Sebastián era sacado a hombros del templo para dirigirse a la playa de La Enramada.

En esta franja del litoral adejero el santo fue recibido por los jinetes, que como viene siendo habitual llevaron a cabo su ofrenda en el mar bajo la atentísima mirada de los miles de devotos que se desplazaron al lugar.

Al término de dicha ofrenda la imagen del santo se trasladó a El Humilladero, en cuyo emplazamiento se encontró la imagen de la Virgen de la Encarnación, patrona del municipio de Adeje.