La paralización de la obra sociosanitaria del futuro hospital de El Mojón (Arona) ya es una realidad. La Unión Temporal de Empresas (UTE) que desarrolla los trabajos, FCC-Construcciones y Syocsa-Inarsa, ha cumplido la advertencia efectuada el pasado mes de diciembre, tal y como avanzó EL DÍA.

La deuda contraída por el Instituto Insular de Atención Social y Sociosanitaria (IASS), dependiente del Cabildo de Tenerife, ha derivado en la suspensión de los trabajos al no haber pagado a la UTE más de nueve millones de euros, cifra que dicho órgano insular rebaja a ocho.

El impago se produce porque la Consejería de Bienestar Social del Gobierno regional "no ha aportado su parte de la obra, que entre 2010 y 2011 ya alcanza los 11 millones de euros", explican fuentes del IASS.

De este modo, aseguran que desde hace meses se están llevando negociaciones a alto "nivel político", pero las mismas siguen sin fructificar.

La situación podría agravarse porque la Consejería de Bienestar Social regional ha confirmado a este periódico que no dispone en estos momentos del dinero para terminar la parte sociosanitaria del hospital de El Mojón, si bien reconoce que se están "buscando fórmulas" que permitan disponer de las partidas económicas para financiar la parte de la obra que le corresponde.

Las fuentes consultadas expresan que la consignación se preveía en la segunda fase del Plan Sociosanitario de Mayores, "pero que se suprimió una vez entró en vigor la Ley de Dependencia".

"Nuestra voluntad es que la obra sociosanitaria de El Mojón salga y estamos trabajando en ello", se asegura desde el área de Bienestar Social del Gobierno canario.

Preocupación en la UTE

La compleja situación preocupa a la UTE. De hecho, las fuentes consultadas explican que desde abril de 2010 no han cobrado "ni una sola de las certificaciones" presentadas al Cabildo, a pesar de que los trabajos continuaron.

"Tenemos toda la voluntad de retomar las obras y por eso hemos presentado" al IASS "diferentes alternativas con el objetivo de desbloquear la actual situación. Sin embargo, hasta el momento no nos han dicho nada, sino que estudiarían las propuestas", manifiestan las mismas fuentes.

También aclaran que los trabajos "sólo están suspendidos" y en ningún momento se ha procedido ni a la renuncia de las actuaciones y tampoco al desmantelamiento de la obra.

"Nuestra intención es continuar con la infraestructura, pero también es necesario que nos paguen lo que se adeuda", insisten las fuentes consultadas de la contrata. Mientras, desde el IASS se asegura que una vez en vigor el presupuesto entregarán cinco millones a la UTE para "aliviar" la actual situación.

Desde el órgano insular también se advierte de que la finalización de la obra, prevista para agosto de este año, podría retrasarse.