Las tres antenas de telefonía móvil ubicadas en el casco urbano del municipio de Arona inquietan a los vecinos de esta zona del municipio "porque no sabemos si las mismas están causando algún tipo de afección a aquellos residentes que se encuentran en zonas próximas a las mismas", manifiesta el presidente de la asociación Almácigo, Sixto Mena.

"No queremos que las antenas permanezcan por más tiempo en el casco y exigimos al gobierno local que ordene su retirada de forma inmediata", señala el máximo representante del citado colectivo vecinal, quien resalta que las antenas "llevan ya instaladas, en algunos casos, más de una década".

"Los nacionalistas, que ahora están impulsando y renovando determinadas ordenanzas, deben implicarse también en llevar a cabo una normativa específica de antenas de telefonía móvil con el objetivo de prohibir que estos dispositivos se puedan colocar en áreas que se encuentren habitadas", comenta Mena.

Hay mucho "miedo"

El presidente de Almácigo indica que "Arona es un municipio muy extenso y tenemos lugares en lo que los sistemas radiantes no molestarían y se evitaría, por tanto, posibles afecciones".

"De hecho, tenemos constancia de que vecinos cercanos a las antenas se nos han quejado de fuertes dolores de cabeza y, aunque no se pueda vincular directamente con las antenas, la población comienza a tener miedo y a preocuparse", expresa el dirigente vecinal.

"Cada cierto tiempo, la última no llega a 15 días, técnicos de las operadoras se desplazan a revisar las antenas ubicadas en las cubiertas, pero lo cierto es que desconocemos lo que hacen porque cuando vamos hablar con ellos nos rehuyen", manifiesta Sixto Mena.

"Por tanto, sería necesario que el Ayuntamiento de Arona, a través de sus técnicos, llevase a cabo una inspección de las antenas de telefonía para comprobar que las mismas se ajustan a la legalidad vigente y no se están superando los límites de radiación permitidos", expresa con preocupación el presidente de la Asociación de Vecinos Almácigo.