Numerosos clientes de la sucursal de CajaCanarias en el Puertito de Güímar, una localidad costera que estos meses tiene varios miles de habitantes por los veraneantes, se quedaron ayer sin sucursal y, además, sin el único cajero automático del pueblo, aunque un portavoz de Caixabank, entidad que absorbió a CajaCanarias en junio, aseguran que el cajero volverá a abrirse. En la puerta del cajero y de la oficina, que es común, un letrero informaba ayer a los usuarios de que la sucursal más cercana es la de la calle Deán Pérez Cáceres, en el centro de Güímar, a unos seis kilómetros. La oficina se cierra porque solo funcionaba tres veces a la semana, según dice Caixabank.