"El gobierno local de Granadilla de Abona debería actuar contra las antenas de telefonía móvil y que las mismas se retiren del área urbana", comentan vecinos de San Isidro.

Afirman que residentes cercanos a estos dispositivos "están sufriendo continuos y persistentes dolores de cabeza casi a diario, por lo que por precaución se tendría que actuar" en consecuencia.

Entienden que el gobierno local "debería encargar un estudio y verificar si las antenas instaladas en San Isidro" están cumpliendo la normativa vigente.

"No sería de extrañar que las operadoras, o algunas de las mismas, hayan subido las potencias en sus antenas para prestar más cobertura. Es extraño, pero los dolores de cabeza han aparecido de un tiempo a esta parte y en distintos segmentos de la población", manifiestan con preocupación.

De este modo, entienden que estos dispositivos se podrían reubicar fuera de la zona urbana "con un poco de voluntad política".