Alrededor de una veintena de palés de alimentos almacenados en las instalaciones del centro cultural del núcleo turístico de Los Cristianos acabaron ayer en un camión de la basura del Ayuntamiento de Arona debido a que se habían caducado.
Galletas, pastas, arroz y caldos de distintas variedades se encontraban entre los productos desechados y "que hemos tenido que tirar por seguridad alimentaria", pusieron de relieve fuentes autorizadas del grupo de gobierno.
Al respecto, explicaron que antes de que caducasen "intentamos distribuir los productos entre las familias más necesitadas del municipio, pero ha sido imposible colocar toda la mercancía".
Las fuentes consultadas resaltaron que los alimentos que se han tirado "son de excedentes que llegan desde Europa, con lo cual los márgenes de caducidad se acortan de forma considerable por todos los trámites por los que pasan estos alimentos antes de llegar a nuestras manos".
"Somos conscientes de la situación, pero tampoco nos podemos arriesgar a dar alimentos que puedan estar en mal estado a los vecinos", manifestaron desde el grupo de gobierno.
Mucho malestar
Por su parte, el portavoz del grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Arona, José Julián Mena, lamentó que los nacionalistas hayan dejado caducar la comida "y eso no se puede tolerar en la actual coyuntura económica".
"El gobierno local debería estar muy preocupado y debe tomar medidas para que jamás se repita un hecho de estas características, más cuando hay mucha gente que lo está pasando realmente mal", indicó el miembro del PSOE aronero.
"No nos valen excusas de ningún tipo y si los nacionalistas no podían distribuirla en su totalidad, lo lógico es que antes de que la mercancía caduque tenía que habérsela ofrecido y entregado a ONG de fines sociales, que estamos convencidos que hubieran buscado salida a esos alimentos antes de su fecha de vencimiento", expresó el jefe de la oposición en la corporación local.
"Lo que ha pasado es lamentable", añadió el portavoz del PP, Dionisio Rocha, quien señaló que "es triste que nos den comida en buen estado y la misma se deje caducar en instalaciones municipales".
"El paro en Arona ya ronda las 9.000 personas y muchas de estas familias están atravesando por una malísima situación, como para que el gobierno local no haya repartido la comida que cuenta entre aquellos que están pasando penas para comer", argumentó.
"Estamos, por tanto, ante un hecho vergonzoso, deplorable y deleznable", comentó con indignación Rocha.
"Además, faltó vigilancia por parte del gobierno local para controlar las fechas de caducidad para evitar que pasara que los alimentos terminasen en el cubo de la basura", resaltó el edil popular, quien consideró que "este tipo de lujo no se puede permitir en ninguna época, y menos ahora".