El Ayuntamiento de Güímar presentó al área de Medio Ambiente del Cabildo un proyecto para instalar cámaras de videovigilancia en los principales accesos a las zonas agrícolas del municipio, una iniciativa que surge del aumento de los robos en las fincas y que también se aprovechará para el control de seguridad y del tráfico en nueve puntos del casco. La propuesta divide el municipio en cuatro sectores, la mitad en la comarca de Agache, y tiene un coste inicial de 141.500 euros, para lo que se espera conseguir financiación de la corporación insular.

La alcaldesa, Carmen Luisa Castro, explica que la idea nace de una reunión en la Alcaldía con la Policía Local y representantes de los agricultores por el incremento de los robos en explotaciones y la percepción de un aumento de la inseguridad en zonas rurales. Además de la presencia de agentes municipales y guardias civiles, se apostó por incluir la videovigilancia en los cruces y puntos significativos para identificar los vehículos que pasen por esas vías cuando se cometa un delito.

La propuesta se presentó hace poco más de un mes a la consejera de Medio Ambiente, Ana Lupe Mora. El sistema intenta ser útil en casos de alertas por incendios forestales, riesgos geológicos y meteorológicos, así como control medioambiental, ya que la mayoría se instalarán en las zonas altas. Con este fin, se han definido 35 puntos de riesgo, divididos en cuatro sectores con capacidad de hasta 10 cámaras por cada uno, y tres ubicaciones para las estaciones base de comunicaciones. La red se plantea con toda la tecnología necesaria para la transmisión de imágenes en directo al centro de control, que se ubicará en el ayuntamiento, donde serán monitorizadas por agentes de la Policía Local y grabadas, al menos, durante 7 días, para su posterior inspección si fuera necesario. La propuesta de pliego de prescripciones técnicas apuesta por una infraestructura de comunicaciones inalámbrica en la banda libre sin licencia de 5GHz, es decir, sin coste anual de tasas, que sea operativa y funcional. Tras el estudio de los principales puntos de riesgo, se han establecido cuatro zonas, de las que la mitad se ubican en los cruces de vías que conectan con la TF-28 en la comarca de Agache, incluyendo la zona de Anocheza, con un total de 15 cámaras. En la parte alta del municipio pero en el Valle, se proponen otras diez, incluyendo el puente de Guaza. Ya en el casco, se plantean 8 puntos en las avenidas Obispo Pérez Cáceres y Santa Cruz y uno en la entrada de los talleres municipales, junto al parque de los bomberos.

euros es el coste de la medida para evitar la proliferación de delitos contra el patrimonio a numerosos agricultores del municipio sureño, que sufren considerables pérdidas en sus huertas.