El alcalde de Guía de Isora, Pedro Martín, explica que "en 5 años hemos ahorrado un 37% en las facturas de consumo eléctrico que paga el ayuntamiento por el alumbrado de calles, colegios, centros culturales e instalaciones deportivas", lo que sitúa a dicho consistorio a la cabeza de la Isla en esta materia. Martín dice que "para nosotros esta política supone una manera de ahorrar, evitando gastos innecesarios que al final pagan los ciudadanos con sus impuestos, al tiempo que contribuimos a reducir la contaminación". Martín indica que desde 2009 el recibo de la luz ha aumentado en un 40% y contemplando los nuevos puntos de suministro, se estima que la factura eléctrica anual del ayuntamiento en 2013 debería haber sido de 650.000 euros, pero fue de 409.000 euros, es decir, unos 241.000 euros menos.

Las estrategias de ahorro energético han estado basadas en cuatro líneas: la contratación de electricidad en el mercado libre; la optimización de las potencias y las tarifas contratadas para adaptarlas al tipo de suministro; inversiones en materia de ahorro energético, así como un adecuado uso de la energía por los empleados municipales y de los ciudadanos en edificios públicos.

Martín apunta que "el plan de ahorro energético lo hemos planteado desde un principio como un modelo de actuación autofinanciable, de tal manera que las inversiones realizadas las hemos podido sufragar con cargo a los ahorros conseguidos cada año mediante la contratación en el libre mercado de la energía con las tarifas más favorables para el ayuntamiento". Las inversiones llevadas a cabo en esta materia han consistido en la renovación de farolas más eficaces y de menor consumo; instalación de baterías de condensadores automáticas que evitan penalizaciones en alumbrado o en estaciones de bombeo; montaje de sistemas de encendido y apagado de alumbrado en instalaciones deportivas, colocación de detectores de presencia en edificios municipales, cambios en alumbrados interiores por tecnología led o T5, por ejemplo, o bien instalar placas solares y mejoras en los sistemas de climatización en salas velatorio o centros culturales.