Aunque el consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Joaquín Bethencourt, asegurara que la perrera comarcal de Fasnia está debidamente legalizada, desde el ayuntamiento el gobierno municipal afirma lo contrario. De hecho, el consistorio lleva varios meses solicitando al Cabildo que aporte la documentación que le falta para cumplimentar el proceso que permita culminar con la concesión de la licencia definitiva.

Este es un asunto por el que el portavoz del Centro Canario (CCN), Germán García, ha preguntado durante las últimas sesiones plenarias, mostrando su preocupación por el hecho de que tales instalaciones se encuentren en uso sin disponer de la licencia.

El alcalde de Fasnia, Damián Pérez, reconoció que la situación es la descrita y "mi preocupación" por lo que está sucediendo, si bien entiende que el procedimiento administrativo es lento, "pero está claro que el Cabildo debe cumplimentar los trámites".

Fue en diciembre del año 2012 cuando tuvo lugar la entrada en servicio, de manera oficial, del centro de protección animal Tierra Blanca, una perrera pública que se ubica en la finca La Valiera de Fasnia y que cuenta con capacidad para albergar a un millar de canes.

La creación de este refugio canino surgió de la necesidad de resolver la grave situación en la que se encontraban 400 perros de una protectora emplazada en Atogo, dentro del término municipal de Granadilla de Abona, animales que fueron instalados meses antes de su apertura a la instalación de Tierra Blanca.

La intención anunciada por el Cabildo era que este centro de Fasnia pasara a ser "el gran refugio de animales abandonados del Sureste de Tenerife". En esa línea, dispuso de una finca, en la que se ubica este recurso, con más de 48.000 metros cuadrados y fue adquirida por la Corporación insular en 2001 para uso ganadero.

La perrera comarcal, que contó con aportaciones privadas para su construcción y para su sostenimiento, era gestionada por la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap), que también se encargó del centro ubicado en Valle Colino a través de un convenio con los ayuntamientos de Santa Cruz, La Laguna, Tegueste y El Rosario.

Así, durante el acto inaugural se puso de relieve la importancia que tiene un recurso de estas características en esta zona de la Isla.

Un servicio para toda la comarca del Sureste

Las instalaciones de La Valiera disponen de dos naves con una superficie total de más de 2.600 metros cuadrados habilitados y en los que se disponen compartimentos para animales. Además, el recinto cuenta con patios exteriores y una clínica veterinaria, entre otras dependencias. El Cabildo de Tenerife ofrece el servicio de acogida de perros a los ayuntamientos de Fasnia, Arico, Güímar, Arafo y Candelaria (la comarca Sureste de la Isla) con el fin de garantizar la atención a los animales abandonados en esta zona. De momento, la situación legal de este recinto no afectará al funcionamiento del centro de protección de animales Tierra Blanca, si bien la oposición municipal ha dado muestras de preocupación. De hecho, CC llegó a rechazar su instalación.